La pirámide escalonada de Zoser, situada en la necrópolis de Saqqara, es la pirámide más antigua de Egipto (4700 años) y se la considera como el prototipo de las posteriormente levantadas en Giza.
Situada en el lugar de Saqqara, esta construcción escalonada en honor al faraón Zoser forma parte de la necrópolis de la ciudad de Menfis -la primera capital de Egipto-, a aproximadamente 30 km al sur de El Cairo y, aunque es el monumento más conocido de esta región, lo cierto es que su interior dista mucho de su belleza exterior. Y es que, a pesar de su buen estado de conservación y su magnitud (118 metros de anchura y 60 metros de altura), la decoración de esta pirámide es nula en su interior.
No así es en la derruida y ruinosa pirámide de Teti, también en el recinto de Saqqara, y a la que merece la pena entrar por su impresionante trabajo decorativo repleto de jeroglíficos bien conservados y figuras en relieve que podrás ver iluminando con una linterna las paredes de alrededor de la ubicación del sarcófago. No te dejes engañar por su estado exterior, mi recomendación es visitarla, pues merece mucho la pena.
Pero Saqqara no solo son pirámides, sino que en este gran recinto podrás disfrutar de la Mastaba de Merekuka, una tumba creada para uno de los hombres de confianza del faraón, cuyas pinturas conservan en gran parte los colores originales y son dignas de observar con detenimiento. Repleta de frescos impresionantes repletos de relieves policromados, sus paredes son una expresión de la vida de la ciudad de Menfis con temáticas como la agricultura, la pesca o la vida cotidiana.
Aunque estos tres son los monumentos más representativos de la necrópolis de Saqqara, lo cierto es que este emplazamiento cuenta con multitud de tumbas que podrás recorrer y que te transportarán a los tiempos de la gran civilización egipcia.
Para hacer esta visita debes saber que unos monumentos se encuentran a bastante distancia de los otros, por lo que nosotros pactamos con un conductor de Uber un precio fijo por el transporte desde el hotel hasta el recinto de Saqqara, los desplazamientos dentro de la necrópolis y el viaje de vuelta.